lunes, 7 de marzo de 2011

UN MAL TRAGO

UN MAL TRAGO

  Noto los golpes en mi costado. Intento llevarme a la boca la botella de whiskey que robé, casi llena, en el último bar que estuve, pero las patadas recibidas desvían el trago y solo consigo derramarme el licor por encima.
            - ¡Tú, escoria, trabaja como todos, en lugar de pedir! - Me dice el tío rapado mientras golpea mis costillas.
  Mira que se que no debo pedir cuando estoy borracho. Siempre me lo dice mi colega el Tapias. Doy aun mas mala impresión de la que suelo dar, y es cuando estoy más débil, por lo que es cuando se hace más probable que cobardes como éste aprovechen para descargar la frustración de su fracaso de vida en mi.

            - ¡Eres una vergüenza para nuestro país, una deshonra de español!... - Continúa.
  Y cuán absurdas me parecen sus palabras mientras intento volver a beber. En balde. Porque lo que él no entiende es que si miras a la tierra desde el espacio, no se ven fronteras. Y que los países son solo áreas de tierra dibujadas sobre los mapas físicos por unos pocos poderosos, por supuesto, para sus egoístas y propios intereses. Y esos mismos hombres poderosos son los que inventaron e inculcaron en individuos como este patán, cruce entre orangután retrasado y lombriz de tierra, también retrasada, los ideales de patriotismo y nacionalismo, con el único propósito de hacerlos bailar a su son. De manipularles.
   
            - ¡Apestas, borracho de mierda! - Me dice.
 Y se dibuja en mi cara una sonrisa, a pesar de los golpes que estoy recibiendo. Porque ser desagradable al olfato, de lo que me acusa el pelado de las botas, se arregla con una ducha, en cambio, lo de su cerebro, ya es más difícil. Una lobotomía, tal vez, le iría bien.
            - ¡Espero que así aprendas a ser un ciudadano respetable! - Me dice sin cesar de patear mis costillas.
  Podría defenderme, pero en estos casos tengo comprobado que es mejor dejar hacer. Satisfacer la ira del atacante. Es el tipo de persona que parará de golpearme cuando se sienta ganador. Cuando sienta que es superior a mí, y cuando antes pase eso, mejor. Entonces, espero pacientemente a que eso pase. Aunque sería mucho mas soportable si consiguiera acertar un trago, aunque solo uno fuera.
            - ¡No quiero volver a verte, escoria! - Y por fin cesa de pegarme, a la vez que suelta un esputo en mi cara.

  Es un gran alivio dejar de sentir golpes de pie en mis costillas y poder dar un trago. Aunque me duele todo el cuerpo. Pero bueno, ahora, ha llegado mi momento. Levanto mi cuerpo dolorido, me acerco sigilosamente por detrás, y le atizo en toda la cabeza con la botella. Por eso era mejor esperar a que parase de golpearme. El cristal, al romperse, ha rasgado la piel del cráneo del imbécil y su cabeza entera ha quedado empapada de un combinado de whiskey con sangre. El saco de mierda humano cae de rodillas, medio aturdido, y es el momento en el que yo aprovecho para prender fuego al whiskey que cubre su cabeza con mi mechero. Al instante se le envuelve todo su cráneo en llamas, como si del motorista fantasma se tratase. Se lleva las manos a la cabeza por el dolor, y se quema también las manos.

  Me siento en la acomodación lateral del vagón mientras él baila en solitario intentando apagar su fuego. Intento darle un trago al whiskey que llevo agarrado por el cuello en la mano, pero no cae ni una gota, pues claro, el cuello es lo único que queda de la botella tras el estropicio.

   En la siguiente parada irrumpen en el vagón los empleados de seguridad. El descerebrado animal abandonará la estación en una ambulancia. Yo en un coche patrulla. Al menos él, se acordará de por vida de este día, y a mi tal vez me den un bocadillo. 


5 comentarios:

  1. Un cuento al revés de como suelen acabar algunos pobres vagabundos. Un abrazo.

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  2. Como molaría más que acabasen, jeje. Un abrazo para ti tambien.

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  3. Interesante relato, interesante y bueno. He sacado varias lecturas y no se muy bien a qué atenerme. Solo espero que no sea lo último que lea sobre este vagabundo.

    Por cierto, estoy viendo que me has enlazado como "blog de interés". Muchas gracias por considerarme así.

    He visto que tienes otro blog, voy a pasar por él.

    Un saludo.

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  4. Gracias hombre. Siempre bienvenido a mis blogs. Las interpretaciones las dejo al lector.
    Saludos.

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